Fundición al vacío: El antiguo proceso de fundición de arte metálico y piezas industriales de precisión

La cera perdida es un antiguo proceso de fundición de metales conocido por sus detalles finos y diseños intrincados.

Esta tecnología no solo puede producir obras de arte bellas, sino que también se utiliza ampliamente en el campo industrial para fabricar una variedad de piezas metálicas de precisión.

El proceso de cera perdida comienza con la elaboración de un modelo. Según los requisitos del dibujo, se abre el molde de cera, se inyecta el material de cera cruda, se enfría y solidifica en el molde, y luego se extrae.

El molde de cera será acabado en detalle para asegurar que cada detalle esté libre de rebabas y defectos en la superficie.

A continuación, el modelo se cubre con una capa de material refractario para formar una cáscara sólida.

Después de que la cáscara se seque, la cera interior se derrite y se drena, dejando un hueco que tiene exactamente la misma forma que el modelo original.

Luego, el metal líquido se vierte en este hueco, lo que a menudo se conoce como vertido.

Después de que el metal se ha enfriado y solidificado, se rompe la cáscara y se extrae la pieza fundida.

Finalmente, la pieza fundida se lija y pulisce para eliminar cualquier marca de fundición que quede, dejándola una pieza terminada suave y perfecta.

La fundición al vacío es muy valorada por su capacidad para capturar cada detalle del modelo, hasta los textos y decoraciones más pequeños. Este proceso no solo es adecuado para pequeños adornos, sino también para grandes esculturas y partes mecánicas complejas. A través de la fundición al vacío, el metal recibe una nueva vida y se convierte en un testigo de la inteligencia y creatividad humanas.